lunes, 20 de abril de 2015

Querida Historia del Arte


Perdónanos por buscarte sólo en el capricho de las modas, por engendrar batallas banales en tu nombre, por prostituirte cada día en lo museos, en las aulas, en los congresos, en las revistas indexadas de alto impacto...por hacerte cargar con la ceguera de nuestros egos y los descalabros de nuestra dignidad. Por no dejarte ser, que es lo único que eres. Por no llorarte nunca.

Querida Historia del Arte, perdónanos por haberte convertido en dogma.  Perdónanos, como sólo tú puedes hacerlo,  por haber dejado de disfrutar de ti.  




No hay comentarios:

Publicar un comentario